¿Cómo te sientes cuando ves una serpiente?
¿O una rana?
¿O una araña?
¿O todo lo anterior?
No importa si retrocedes con repugnancia o te entusiasmas con la emoción: la invitación a los paseos nocturnos de los viernes en Finca Cántaros se extiende a todos por igual.
Este programa es uno de los muchos espacios de educación ambiental comunitarios que FCEA ofrece de forma gratuita a la comunidad. Lanzado en marzo de 2021, se lleva a cabo semanalmente de 6 a 8 p. m. y está dirigido por nuestro Coordinador de Extensión Comunitaria, Randall Jiménez. Las caminatas nocturnas brindan a personas de todas las edades la oportunidad de observar el fascinante mundo nocturno de nuestros bosques. Un mundo en el que los participantes han mantenido respetuosamente la distancia mientras una serpiente se desliza por un camino; han contado varias especies de ranas diferentes salpicadas en un grupo de plantas; o se han maravillado con una gran araña iridiscente que teje su tela. Randall siempre deja que la naturaleza dicte la agenda y la ruta de la actividad: los participantes pueden decidir seguir un llamado interesante desde lo alto del dosel hasta que se encuentren con un kinkajou, o detenerse a unos pocos metros de la entrada de la finca para saborear la vista de un lagarto de cabeza de casco poco común.
Algunas personas se sienten atraídas por los Paseos Nocturnos una y otra vez (en particular, las mujeres jóvenes) debido a una curiosidad existente por estos y otros animales. Otras comenzaron a venir con inquietud y nociones preconcebidas sobre ciertas especies que se están transformando en respeto, aprecio o acción gracias a su participación.
Una mujer creció escuchando que la serpiente fer-de-lance (o terciopelo, como se la conoce localmente) persigue a las personas para morderlas. Se sorprendió cuando una Caminata Nocturna disipó este mito de larga data, ya que los participantes pudieron observar a una terciopelo desde una distancia segura deslizándose alegremente por su camino, desinteresada por la audiencia humana asombrada. (Es importante señalar que la terciopelo es de hecho venenosa y puede ser agresiva, pero típicamente cuando uno entra en su espacio o la provoca). Otra mujer confesó que siempre le han parecido espeluznantes las ranas, pero al asistir a las Caminatas Nocturnas y entrar en contacto con ellas de manera más continua, el miedo se está desvaneciendo gradualmente. Finalmente, una participante le dijo a Randall que piensa en él y en las Caminatas Nocturnas cuando encuentra arañas en su casa, y se siente inspirada a transportar suavemente a estas criaturas afuera en lugar de matarlas. Estas anécdotas encarnan varios objetivos de educación ambiental que se extienden a todos los programas de FCEA: ayudar a disipar mitos negativos sobre el mundo natural, fomentar su apreciación y motivar un cambio de comportamiento positivo.
Así que te invitamos a que vengas con tu repulsión o emoción y descubras cómo puedes ser sorprendido por la Naturaleza... y por ti mismo.