Reflexiones de Ameya sobre su experiencia de prácticas en Finca Cántaros

Educación Ambiental
22 de agosto de 2025
Por: Lilly Briggs

PUBLICACIÓN EN ESPAÑOL 🇨🇷 | INGLÉS A CONTINUACIÓN 🇨🇦

🇨🇷¡En Finca Cántaros recibimos practicantes de todo el mundo!🌍 Aquí están los pensamientos de Ameya, de la India 🇮🇳, sobre su experiencia con nosotros.

En los últimos años, al tratar de forjar un camino de aprendizaje en la conservación, a veces me he dado cuenta de que puede ser un campo solitario o uno en el que quedan atrapados en patrones conocidos. Mi tiempo en Finca Cántaros fue todo lo contrario.

Desde el primer día, presenciando mi primer programa de anillamiento de aves, me sumergí directamente en la acción, ya de ahí todo fue en ascenso. Cada día abriría un nuevo camino de aprendizaje: trabajar con lombricompost, unirme a los esfuerzos comunitarios de reforestación, recolectar datos de aves en diferentes ecosistemas y asistir a talleres con algunos de los mejores ecólogos e investigadores del mundo. Y quizás lo más memorable: estar rodeado de personas tan amables y pacientes que me ayudaron a tropezar con mi español inexistente, lo cual fue un espectáculo de comedia en sí mismo.

Debo una enorme gratitud a las maravillosas Lilly y David, quienes me recibieron en Finca Cántaros y me dieron la oportunidad de aprender de esta hermosa organización. Mi viaje aquí no habría estado completo sin Roci, Jeffry, Lita, Magaly, María, Maribel, Beto, Alexis, Adrián y todos los demás que hicieron que Cántaros se sintiera como hogar, abriéndome sus casas para comidas, bebidas, incluso un corte de cabello, y rodeándome de una calidez y hospitalidad que nunca hubiera soñado. Y por último, pero no menos importante, a Lucy y Kai, por decir mi nombre de la manera más tierna posible.

La pura vida es real. Me voy con recuerdos que siempre atesoraré y, aún más importante, con el deseo de regresar, compartir nuevos conocimientos, seguir aprendiendo y construir nuevos recuerdos juntos. 🌱💚

🇨🇦¡En Finca Cántaros recibimos a pasantes de todo el mundo!🌍 Aquí están las reflexiones finales de Ameya, quien se unió a nosotros desde su India natal 🇮🇳, sobre su experiencia con nosotros.

En los últimos años, al intentar forjar mi propio camino de aprendizaje en conservación, a veces me he dado cuenta de que puede ser un campo solitario o uno donde uno se queda atascado en patrones familiares. Mi tiempo en Finca Cántaros fue todo lo contrario.

Desde el primer día que presencié mi primer programa de anillamiento de aves, me lancé de lleno a la acción, y desde entonces todo fue en ascenso. Cada día se abría un nuevo camino de aprendizaje: trabajar con lombricomposta, sumarme a iniciativas de reforestación comunitaria, recopilar datos sobre aves en diferentes ecosistemas y asistir a talleres con algunos de los mejores ecólogos e investigadores de todo el mundo. Y quizás lo más memorable fue estar rodeado de gente amable y paciente que me ayudó a aprender mi inexistente español, lo cual fue un espectáculo cómico en sí mismo.

Estoy enormemente agradecida con los maravillosos Lilly y David, quienes me recibieron en Finca Cántaros y me dieron la oportunidad de aprender de esta hermosa organización. Mi camino hasta aquí no habría estado completo sin Roci, Jeffry, Lita, Magaly, María, Maribel, Beto, Alexis, Adrián y todos los que hicieron que Cántaros se sintiera como en casa, abriéndose a comer, beber e incluso cortarme el pelo, y rodeándome con una calidez y hospitalidad inimaginables. Y por último, pero no menos importante, a Lucy y Kai, por decir mi nombre de la forma más tierna posible.

La pura vida es real. Me voy con recuerdos que atesoraré para siempre y, aún más importante, con muchas ganas de volver, de compartir nuevos conocimientos, de seguir aprendiendo y de crear nuevos recuerdos juntos. 🌱💚

Leer más historias

Manténgase en contacto.

Inscríbase en nuestro Boletín Digital para estar actualizado de nuestras últimas noticias y eventos.